Desde el nacimiento de la fotografía, allá por 1824, cualquier tipo de publicidad ha permanecido siempre muy ligada a ella. El motivo es sencillo, la imagen vende, y eso no va a ser diferentes el en mundo online. Podríamos decir que casi cualquier cosa que haya triunfado en el mundo tradicional es también factible de triunfar en el mundo online, por supuesto, adaptando el concepto a Internet y al comportamiento del usuario en las redes y los buscadores.
