Prepara tu objetivo porque te traemos los mejores trucos para que los más pequeños de la casa salgan a la perfección en las fotografías. Y es que, ya lo habrás comprobado, pero hacer fotos a sus locos bajitos, (que cantaba Joan Manuel Serrat) no es nada fácil. Son seres muy espontáneos e imprevisibles que lo mismo pueden ser encantadores que negarse a hacer la foto Seguro que sabes de lo que estamos hablando. Por eso, antes de lanzarnos a fotografiar a ten en cuenta esta serie de trucos y recomendaciones para ser capaces de conseguir los mejores resultados.
Lo primero que hay que hacer es ganarse su confianza. Si el niño está nervioso o duda de las intenciones pues nunca podrá salir bien en las fotos. Lo principal es no intimidarles, para lo cual lo mejor es tratar crear un entorno tranquilo y agradable y ganarse su confianza interactuando con ellos, hablándoles. Hay que hablarse, empatizar con ellos y hacerles creer que se trata de un juego. Verdad que cuando ellos piensan que están jugando se les nota mucho más accesibles.
Planificar
Hay que planificar la sesión. No podemos tenerles cinco horas y de las cuales muchos minutos sean a la improvisación. En cualquier caso, siempre debería prevalecer la norma de no obligar a un niño a ser fotografiado.
Vamos con los trucos más técnicos. En primer lugar te tienes que poner a su altura. ¿Cómo? Pues tendrás que agacharte o tirarte al suelo si es necesario para poder captarles desde un ángulo adecuado y que no resulte desfavorecedor para ellos. Además esta técnica de trincheras va a servir para que él pierda el miedo y al verte en su mismo mundo seguro que no duda en querer participar.
Iluminación
La iluminación en la fotografía infantil es muy importante. Busca el lugar y el momento con la mejor iluminación. Por supuesto te tienes que asegurar de tener suficiente luz, si no la tienes ya sabes que puedes abrir el diafragma, aumentar la ISO o usar el flash. Nuestra recomendación es la de un teleobjetivo corto y preferiblemente luminoso. Por ejemplo un objetivo fijo de 50 mm ƒ1.4 o ƒ1.8 es una opción barata y una excelente apuesta para estas cuestiones. Así como para plasmar fenómenos del cielo como eclipses o fases lunares.
Vigila el fondo. Sabemos que estos pequeñajos se distraen con cualquier cosa, así que lo que tienes que hacer es evitar que cualquier cosa capte su atención. Si no aporta nada, cierra el encuadre o abre el diafragma para desenfocarlo.
La fotografía de niños es fotografía en estado puro, es vida, es la pura verdad. Por eso una buena opción es el modo de prioridad a la velocidad, en el que escoges una velocidad mínima en la que te asegures de que tus imágenes y tus protagonistas no quedarán movidos. Prepara bien el dedo porque un par de ráfagas serán esencia, sobre todo si prevés una sesión movidita.
Planos
Prueba diferentes planos , pero no te olvides de los primeros planos y los detalles, que son los que mejor te permitirán resaltar y centrar la atención en su mirada o en los gestos de su rostro. La mirada de un niño es algo puro, la sonrisa aún más, normalmente las fotos más naturales, y las más bonitas, suelen proceder de este tipo de acciones. Por estas cuestiones no dudes en disparar la cámara cuando no miren. Las miradas cómplices entre dos niños, entre ellos y sus padres y madres, abuelos, pueden ser perfectamente de portada de revista.
Eso sí, cuando tengas las fotos no dudes en enseñárselas, con esta táctica irán cogiendo más y más confianza. No dudes en fotografiar a niños de todo tipo. Nos llena de ilusión y de alegría saber que ahora niños con síndrome de Down también son protagonistas de las campañas de publicidad.
Tienes que tener en cuenta la ropa que el niño o la niña van a llevar para la sesión de fotos. No es lo mismo vestir con cuadros que con rayas. De color blanco que de color negro. Son aspectos que tienes que tener en cuenta. Si las tienes te pueden salir fotos de modelos, como por ejemplo los que aparecen en la web de Reprepol, donde puedes encontrar niños con ropa moderna con toque juvenil y que están listos para modelar.
Aquí te dejamos esta serie de trucos y consejos para que tengas en cuenta en tu próxima sesión de fotos con los más pequeños. Si les pones en marcha y sobre todo, tienes paciencia, seguro que consigues unas fotos de revista.
